AUTORA: Lic.
María Eugenia Parla.
MN:
50339
MP:
96610
mariaeugeniaparla@gmail.com
Buenos
Aires, Año 2014.
El
suicidio, a nivel mundial, se posiciona entre las primeras tres
causas de muerte en personas de entre 15 y 44 años. En Argentina,
entre la población adolescente, figura en segundo lugar, y mas de la
mitad de los intentos de suicidio son protagonizados por jóvenes de
entre 15 y 29 años.
En
los hombres la tasa de suicidios consumados cuatriplica a la de las
mujeres y los métodos mayoritariamente utilizados son violentos
(CIE-9 ahorcamiento, armas de fuego). En las mujeres son mas
frecuentes los intentos
de suicidio, esto puede deberse a su preferencia por métodos suaves
(por ejemplo ingesta de medicamentos, envenenamiento).
Lo
anteriormente dicho demuestra la importancia de contar con
estrategias para prevenir el suicidio
Definición
Según
la Organización Mundial de la Salud (OMS), las conductas
suicidas
van desde la ideación suicida, el intento de suicidio hasta el
suicidio propiamente dicho (suicidio consumado). La ideación suicida
tiene en cuenta desde el deseo de morir, representación del
suicidio, idea vaga sin planeamiento de la acción, idea con
planeamiento inespecífico, hasta la mas grave de todas; idea con
adecuada planificación.
Esto
pone de manifiesto la necesidad de identificar a los individuos
en riesgo
para poder brindar una asistencia adecuada que se adapte a los
requerimientos de cada caso.
¿Cual
es su causa? Factores de riesgo.
Aún
no hay consenso en cuanto a la causa, pero se sabe que es un fenómeno
multifactorial, es decir, que responde a variables biológicas
psicológicas y sociales donde un
estresor vital que supera el umbral de tolerancia de un individuo
predispuesto desencadena o se suma a un determinado trastorno mental
preexistente
Se
sabe que entre un 90 y 95 % de las personas que cometen un intento de
suicidio padecen algún tipo de trastorno mental, (entre ellos los
mas comunes son depresión, alcoholismo y esquizofrenia) o
enfermedades incapacitantes de curso crónico.
En
cuanto a la esfera social;
parecen acrecentarlo sucesos
vitales estresantes tales como las crisis económicas, aislamiento
social, malas relaciones interpersonales, abusos, haber sido criado
en un ambiente caótico violento y negligente, fracaso escolar y
presión social. Por otro lado, también el abuso de sustancias,
intentos de suicidio previos o tener familiares o amigos con
conductas suicidas.
¿Porqué
alguien intentaría suicidarse? Elementos comunes y motivos mas
frecuentes.
A
esta pregunta hay tantas respuestas como individuos en el mundo. Sin
perder esto de vista podemos encontrar un elemento común en todos
los suicidas (Shneidman)
y es el deseo del
cese de
la
conciencia, evadirse de algo intolerable. Es un mito muy común el
pensar que el suicida no quiere vivir más (pues se ve que guarda una
relación ambivalente con la vida) sino que no quiere vivir más así.
De
manera secundaria pueden aparecer otros objetivos relacionados con la
carencia o frustración ante un otro. Este sería el aspecto social
del suicidio, la toma de posición respecto a un otro; así el
intento de suicidio aparece como una forma de expresar rabia, culpa,
inconformidad, frustración, agresión, reclamo de apoyo, petición
de ayuda o venganza.
Así
como existen factores de riesgo, existen también factores
protectores. Se trata de características y recursos que se pueden
potenciar o poner en marcha para contrarrestar la conducta suicida.
Todos
podemos hacer algo al respecto, como familiares o amigos, como
profesionales y como sociedad.
QUE
PUEDEN HACER LOS FAMILIARES Y AMIGOS ANTE UN INTENTO DE SUICIDIO.
Lineamientos para el apoyo social
- Tratar de entenderlo; se sabe que las personas suicidas mantienen una perspectiva pesimista sobre su futuro, su entorno y sobre ellos mismos, así como un estilo atribucional depresivo (Beck, Rush, Shaw y Emery, 1979). Este estilo atribucional depresivo significa que establece una causa interna, estable y global sobre los eventos negativos, por lo cual se reduce la percepción de soluciones disponibles y esto conduce a la indefensión, es decir, se anulan los intentos de buscar alternativas para resolver una situación (o conjunto de situaciones) y esto produce mucho malestar, porque se genera la sensación de que haga lo que haga no va a poder cambiar el curso de las cosas.
- Actuar desde el respeto, no retarlo ni intervenir desde la sanción moral. Pensar que esta persona percibe que está pasando por una situación muy difícil, que no tiene los recursos suficientes para afrontarla y desde su lógica, el suicido se le presenta como la única alternativa posible, por lo que se recomienda no reprocharle su manera de pensar o actuar.
- Tomar en serio las ideaciones suicidas y amenazas. No es conveniente desafiarlo, ni utilizar sarcasmos. Tampoco presuponer que lo que quiere es llamar la atención (esto puede aparecer de manera secundaria, porque por el hecho de utilizar el suicidio como medio para este fin de todas formas muestra una marcada desvalorización de la propia vida).
- Preguntar directamente sobre los pensamientos suicidas, sin temor, con aceptación. Contrariamente a lo que se cree, hablar acerca del suicidio puede reducir el riesgo de otro intento. Hablar abiertamente sobre el suicidio nos permite conocer los motivos que le llevan a querer acabar con su vida y barajar alternativas de solucionarlo o brindar apoyo emocional si ya no tiene solución.
- Privilegiar la escucha activa. Esto implica escuchar con atención y empatía, facilitar el uso del discurso, no impedir el llanto o la expresión de emociones.
- Ayudarle a explorar otras opciones mas allá de la autodestrucción, aunque en este momento le parezcan inverosímiles. Ayudarle a buscar ayuda profesional. No dejarlo solo (pero que tampoco sienta que se lo está controlando todo el tiempo) y restringirle el acceso a medios letales.
- Estar atento a las señales de alarma
- Hacerle ver que no esta solo, transmitir esperanza en el futuro; sirve mucho hacer planes o proyectos. Alentar a que busque ayuda profesional. Idear juntos un plan de acción en caso de que se vuelva a sentir mal, etc
- Conocer los Mitos y Realidades sobre el Suicidio
(CUADRO
B)
QUE
PODEMOS HACER COMO SOCIEDAD PARA PREVENIR EL SUICIDIO. Estrategias de
prevención
Un
programa de prevención debe proporcionar las herramientas para
evitar el primer intento suicida, su desenlace fatal y su repetición.
Para esto es necesario:
- Capacitar a profesionales de atención primaria en detección del potencial riesgo suicida y posterior derivación a profesionales de la salud mental.
- Poner en marcha programas de prevención para toda la comunidad ya que cualquiera puede transformarse en agente de salud (Ver “Que pueden hacer familiares y amigos...”).
- Erradicar mitos, educando a la comunidad (Cuadro B).
- Se sabe que la divulgación sensacionalista por parte de los medios de comunicación acerca de los suicidios (especialmente si se trata de celebridades) tienen un impacto directo en su aumento en la población. Especialmente en los adolescentes (grupo de riesgo) se da un factor llamado “Efecto de la identificación (Werhter)”. La conducta suicida de una persona puede desencadenar otra similar entre su grupo de pertenencia. Los medios deberían abstenerse de publicar fotos y hacer comentarios sensacionalistas al respecto.
(CUADRO
C)
QUE
PODEMOS HACER LOS PROFESIONALES DE LA SALUD MENTAL
Detección
y elementos de evaluación psicológica
La
herramienta mas importante para la evaluación del riesgo suicida es
la entrevista
clínica,
en donde se hace un screening de la situación del paciente. Se trata
de detectar patologías, en especial depresión, bipolaridad, abuso
de sustancias y trastornos de la personalidad, ya que constituyen un
factor de riesgo importante.
Se
evaluá si el paciente presenta ideación suicida, y en tal caso se
deberá abordar que tan frecuente e intensa es la misma, si planificó
una situación específica (si es así indagar cómo donde y cuándo),
el método y su accesibilidad al mismo, además del motivo que lo
lleva a tomar semejante decisión.
Evaluar
grado de esperanza/desesperanza en relación al futuro y ,
antecedentes propios (si hubo intentos previos, frecuencia y
severidad) o familiares (prestar atención a las fechas,
aniversarios), sentimiento de culpa, apoyo social (en la medida de lo
posible real y percibido), valores y creencias
Otras
herramientas que evalúan riesgo suicida son: Inventario de depresion
de Beck, desesperanza, escala de evaluacion del suicidio, escala de
intención suicida, escala de riesgo suicida, reasons for living
scale. Test de Roscharch, persona bajo la lluvia, mmpi2, etc.
Marco
legal
Ver:
ley 23.277 Art. 8 y Ley 26.657.
FACTORES
PROTECTORES. Consideraciones finales.
Elementos
que no pueden faltar en un tratamiento en personas con conductas
suicidas
- Foco en la esperanza en el futuro. La desesperanza es la variable mas peligrosa, por lo que resulta conveniente estimular.
- Búsqueda de alternativas y nuevas formas de afrontamiento frente a los estresores de la vida. Desarrollar Resiliencia,
- Trabajar de manera interdisciplinaria. Interconsulta psiquiatrica. Hay guías disponibles con protocolos terapéuticos.
- Las ideaciones y los comportamientos suicidas tienden a recurrir (aunque no necesariamente), por lo que el seguimiento se vuelve imprescindible.
- Adquisición de competencias tales como comunicación y resolución de problemas. Desarrollo de habilidades sociales. Trabajar sobre la asertividad para el manejo no violento de conflictos y la expresión adecuada de las emociones.
- Autoestima. Estimular la confianza en sí mismo y en sus logros.
- Búsqueda de apoyo social y actividades programadas (si es actividad física mejor) que resulten gratificantes.
- Establecimiento de un contrato terapéutico y un plan de acción para recaídas.
- Emergencias médicas: 107 (brinda un servicio gratuito de ambulancias y atención médica de urgencia)
- CENTRO NACIONAL DE INTOXICACIONES - Hospital Nacional "Prof. Alejandro Posadas"
Tel: (5411) 4658-7777/ 4654-6648/4658-3001/3020 Fax: 465-4798
Línea telefónica de cobro revertido: 0-800-333-0160 | E-mail: crapanzano@intramed.net.ar
Horario de Atención: 24 hs. - UNIDAD DE TOXICOLOGÍA - Hospital General de Agudos "J. A. Fernández"
Tel: (5411) 4808-2655 Tel/Fax 4801-7767 E-mail: toxifer@cvtci.com.ar
Horario de atención: 24 hs.
No hay comentarios:
Publicar un comentario